La Vuelta 2018 (25 de agosto-16 de septiembre) se desveló este pasado sábado en Estepona y dio los detalles de lo que será a priori la jornada decisiva. La Vuelta pasara por Vélez Rubio el próximo 31 de Agosto en una etapa con salida en Puerto Lumbreras y llegada en Pozo Alcon. Un etapón en la penúltima etapa en Andorra: seis puertos en apenas 105 km con más de 4.000 metros de desnivel y final en La Gallina. Cuando apareció el perfil en la pantalla del auditorio Felipe VI de Estepona arrancó los murmullos del público por su dureza. Recuerda, sin llegar a ese nivel, a la que se disputó en 2015 y que Javier Guillén, director de la carrera, ya había mostrado su deseo de repetirla el penúltimo día.

Una etapa que entonces se apuntó un Mikel Landa presente en Estepona que, como ya había adelantado As, confirmó que correrá Tour-Vuelta y que le gusta la etapa andorrana: "La afrontaré con ilusión". Según Javier Guillén, la idea de hacer una etapa así es que "nada esté resuelto hasta entonces o que pueda cambiar todo".

Pero no será porque antes no haya terreno para sentenciar. Nueve finales en alto en total que se distribuirán en tres cada semana aunque la dureza irá subiendo progresivamente. El arranque aún en agosto en Andalucía ya contará con la crono inicial en Málaga, el primer final en cuesta en Caminito del Rey (2ª etapa) y la primera cima inédita, La Alfaguara (4ª). Terrenos para las emboscadas como la llegada en bajada de Roquetas o el final quebrado en Pozo Alcón también añadirán picante a un primer tramo de carrera que acabará en La Covatilla.

El regreso a Galicia tampoco será ningún paseo, aunque de la segunda semana llama poderosamente la atención el durísimo fin de semana. El viernes 7 de septiembre La Camperona, el sábado ya en Asturias otra de las novedades (Les Praeres el 8 de septiembre, festividad asturiana) y para el domingo un clásico como Lagos de Covadonga hará una criba importante antes del tramo final.

Una última semana que arranca con una crono de 32,7 km entre Santillana del Mar y Torrelavega, una preciosa etapa de montaña con la novedosa llegada en alto del Balcón de Bizkaia, y, tras la penúltima opción de los sprinters en Lleida, el final de fiesta en Andorra con dos interesantes jornadas: una etapa unipuerto con llegada a Naturlandia y la traca final de seis puertos. Jornada que, si nadie ha sido capaz de sentenciar, se prevé tan dura como espectacular ya que, como afirmó Guillén, "la Vuelta es la Vuelta y la gente sabe a lo que viene".

Fuente:www.as.com